Translate

jueves, 2 de mayo de 2013


Mate, mate el chocolate

Lo peor de los días miércoles es que me toca Matemática a las dos últimas horas… ¡Qué abuso!

Ayer, todos nos despedimos del profesor, sin antes haber escuchado  el timbre de salida.

-¡Hey! ¿Quién dijo chau?-preguntó, al darse cuenta que ya estábamos en la puerta del aula. Pensé que en verdad quería obtener una respuesta, es por eso, que respondí: ¡Yo!...Carcajada general.

-¡Ah! ¡Vaya, vaya!...¡Señorita Paciencia!

-¡Eh!...No, profesor…

-Por graciosa, sales al último-me dijo.

-Apruebas las prácticas y jalas actitudinal-se burló Mariana de mi desgracia.

-Y a mí que me caía bien este profesor-le dije, pero fue ese preciso momento en el cual hubo un silencio total.

-¡Ah! ¡Pasado!-dijo el profesor quien había escuchado perfectamente.

-Pasado, presente y futuro-traté de arreglar la situación.

Nos mandó a sentar y nos advirtió que él sería quien diría que alumnos podrían salir y en qué orden.

-Profesor, yo…-traté de decir.

-¿Tú?... ¿Tú? ¡Te quedas hasta el final!

-¡Qué tal hijo de…!-Comentó Diego, pero se detuvo, pues el profesor le mandó una mirada de sorpresa y desaprobación.

Todas las alumnas ya se habían retirado.

-Ahora pueden salir todos los varones.

-No sea malo- le supliqué.

-¿Qué quieres?-me preguntó.

-Yo quiero mi agüita de coco. Estoy de sed-respondí con una sonrisa en mi rostro. El profesor no pudo evitar reírse ante mi respuesta.

-Ya está bien, puedes salir. La próxima vez, te quedas hasta las cuatro conmigo.

-¡Ah! ¡Qué tal castigo!-respondí.

-¡Señorita Paciencia! ¡Por favor, compórtese!-bromeó el profesor.

-Tutéeme, profe, tutéeme, estamos en confianza, le dije. Él se limitó a reírse-Profesor, yo lo quiero; es más, soy su hincha. Estoy pensando seriamente en tatuarme su nombre.

No es ninguna sorpresa que las personas pasen varias horas durante el día en las redes sociales. Y es muchas veces ahí en donde aprendemos nuevas frases o jergas. Por ejemplo, al profesor le fascina la frase: Ola Kase, de Facebook, es por eso que en todas las clases nos habla de esa manera.

-Ola K ase, desaprobándome en actitudinal o k ase?-le pregunté segundos antes de retirarme.

-Ola K ase, molestando a su profesor de Matemática o K ase?-respondió.

Jamás hubiese dicho el año pasado que mi profesor de Matemática me caía bien, pero este año era diferente.

-Profesor, ¿cómo está en esta bella mañana?-le pregunté.

-Bien, hasta hace dos segundos.

-¿Y qué pasó?-pregunté, sabiendo la respuesta.

-Hablé contigo-respondió.

-¡Auch!-comenté. Carcajada general.

A toda la Promoción nos cae bien este profesor, pues si bien es cierto que es profesor de Matemática del nivel uno, también enseña R.M. a las cuatro aulas.

-Nada comparado con mi querido Javi-comentó Andrea.

-Sé que lo extrañas-le dijo Mariana.

-¡Qué voy a extrañar a ese muggle?-Dijo Andrea. Sí, a ella le encanta Harry Potter.

Después de comentar sobre nuestro queridísimo anterior profesor, se percataron de que estaba detrás de ellas. Ya no podían hacer nada. Lo único que les quedaba era estudiar bastante para no bajar el nivel dos, pues el profesor que está ahí, es mi querido amigo Javicho.

Priscila Zumaeta. De su novela inédita Las tribulaciones de la señorita Paciencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario